Medio Ambiente

La ubicación geográfica en la que se encuentra México, así como el clima y su topografía, lo hace ser un país de grandes contrastes naturales, tenemos ríos, mares, lagos, lagunas, océanos que ocupan aproximadamente el 65% del territorio nacional, así como bosques, selvas, matorrales y desiertos, que cubren aproximadamente el 35%. Estos ecosistemas albergan una gran diversidad de especies, que hacen que nuestro país se ubique dentro de los cinco países denominados “megadiversos” como China, Colombia, Brasil, Indonesia y Perú.

Los ecosistemas juegan un papel importante en la vida del hombre como proveedores de bienes y servicios, así como proveedores de servicios ambientales, por ejemplo: regulación del clima, producción de oxígeno, sumideros de CO2, formadores de suelo, regulación del ciclo hidrológico, zonas de esparcimiento y recreación, entre otros.

Sin embargo, las actividades humanas como la deforestación, sobrepesca, la agricultura, la ganadería, las actividades industriales y la minería, así como la sobreexplotación de los mantos acuíferos, ha provocado un fuerte impacto ambiental.

Tan solo en el 2016 se perdieron 274 mil hectáreas de bosques lo que ubicó a México en el séptimo lugar a nivel mundial en deforestación de acuerdo con la Global Forest Watch.

La deforestación trae como consecuencia otros problemas ambientales, como la erosión de los suelos, pérdida de la biodiversidad, fragmentación del hábitat, pérdida de la recarga de acuíferos, inundaciones y reducción en la captura de CO2, principal gas efecto invernadero, causante del cambio climático global.

El cambio climático, ha provocado aumento de la temperatura arriba de 1.5 °C, y ha traído como consecuencia sequías prolongadas, inundaciones, aumento en la intensidad de los huracanes, acidificación de los océanos, todo esto debido al aumento de los gases efecto de invernadero como el CO2, el metano, ozono, clorofluorocarbonos y óxidos de nitrógeno, producto de las actividades agrícolas, pecuarias, industriales y el transporte.

El Barzón se ha caracterizado por impulsar diversas luchas en defensa del medio ambiente promoviendo el uso eficiente del agua y energía, el manejo agroecológico de los suelos, el uso de energías alternativas, así como el reciclaje de los residuos agropecuarios, agroindustriales y domiciliarios para la elaboración de composta, para contribuir a la reducción de las emisiones de uno de los gases efecto invernadero como el metano, el segundo más importante después de CO2.

De la misma forma El Barzón ha emprendido luchas en contra de la tala clandestina y la defensa de los bosques, promoviendo acciones de reforestación y el establecimiento de huertos de traspatio, manejo agroecológico de pequeña y mediana propiedad y el establecimiento de huertos urbanos, se han enarbolado luchas en contra de los alimentos transgénicos, del uso de pesticidas como el glifosato, ha promovido también la soberanía y seguridad Alimentaria, la preservación de semillas criollas.  Todo esto para transitar hacia un desarrollo sustentable, que involucre sus dimensiones: social, económica, ecológica y cultural.

El cuidado y la protección del medio ambiente requieren la participación consciente de los habitantes de este planeta y los desafíos que en materia ambiental tiene México son muchos.

¡Trabajemos juntos cuidando y defendiendo nuestro medio ambiente!